La cúpula de Bankia sigue cambiando de caras. Hoy ha sido el presidente de Bancaja quien ha dimitido. Mientras, el banco nacionalizado sigue revisando sus cuentas para calcular la factura de dinero público que necesitará. Entre 7.000 y 7.500 millones de euros más para hacer frente a los riesgos de su cartera inmobiliaria, según el Gobierno. A pesar de ello, el ministro de Economía sigue poniendo la mano en el fuego por la banca española y descarta la intervención desde Europa.Para despejar toda duda, hoy el Banco de España ha contratado a dos consultoras que evaluarán la salud de nuestras entidades. Una firma alemana y una estadounidense, Oliver Wyman, que eligió en 2007 como mejor entidad del mundo al banco anglo irlandés, dos años después nacionalizado por su mala situación. La misma consultora que ocultó información de sus cuentas cuándo fueron supervisadas. Esos examinadores harán una prueba de esfuerzo a los bancos españoles ante escenarios más adversos y mirarán con lupa sus activos. Los primeros resultados estarán listos en un mes.