El consistorio esperaba que los radares pillaran in fraganti a muchos infractores, pero 300 cada día en un semáforo son demasiados. Ha ocurrido en Sevilla. El ayuntamiento ha instalado tres radares de semáforo en grandes avenidas de la ciudad y el resultado ha sido el mismo en todos. Durante un mes han estado de prueba y sólo enviaban cartas informativas a los infractores, pero a partir de hoy comienzan a multar. La sanción es de 200 euros y cuatro puntos.