No van a una fiesta de disfraces. Estos entrenadores de la base china de Sichuan han tenido que enfundarse en un traje de oso panda para capturar a Taotao,esta cría de dos años. Tras una vida en la reserva, han intentado engañar al animal con fin de liberarlo en el parque natural natural de Lizping y poner fin a su cautiverio. Pero la tarea no ha sido nada sencilla.Los entrenadores han tenido que untar los trajes con orina y heces de pandas para atraer a Taotao.El dispositivo inalámbrico de seguimiento también ha sido una pieza clave para encontrar a Tatao en los 240 mil metros cuadrados en los que se encontraba.Después de cuatro horas de intentos, Taotao se ha sentido atraído por un montón de cañas de bambú y se ha introducido en la jaula.