La ley Antitabaco ha entrado en vigor en pleno invierno, cuando más cuesta salir a la calle. Sin embargo, los hosteleros se las han ingeniado para encontrar remedios contra el fío. La solución, colocar todo tipo de estufas para calentar las terrazas de la calle. Algunos hasta reparten mantas para que sus clientes soporten mejor el frío. Todo sea por no perder una clientela fumadora.