Un aficionado persigue a Messi para hacerse una foto con él y cuando lo consigue se le caen los pantalones. Pese a ello el seguidor no cesa en su empeño de lograr un recuerdo de la estrella argentina, y pese a las risas de los presentes sigue en su búsqueda. Al final Messi aprovechó el tiempo empleado por el seguidor para meterse en el taxi y volver a casa.