Toca seguir penando. El Banco de España advierte de que el crecimiento económico será inferior al previsto por el Gobierno este año y el que viene. En cualquiera de los casos insuficiente para crear empleo. El propio Zapatero reconoce que la reducción del paro será lenta. Y admite sus errores a la hora de gestionar la crisis. Pese a los recortes en los sueldos de los funcionarios, en las pensiones o la supresión de ayudas, el Banco de España asegura que no se cumplirán los objetivos de déficit. El desempleo se resiste a bajar del entorno del 20 por ciento. El Gobierno está convencido de que existe mucho fraude. Por eso endurecerá el castigo a quien esté cobrando el paro y a la vez esté trabajando en la economía sumergida.