Francisco Camps, presidente de la Generalitat valenciana ha dicho hoy en su discurso en el pleno de investidura, celebrado en las Cortes Valencianas, que España disfruta de una democracia "muy viva y que cambia todo aquello que no funciona y que no le gusta; una democracia moderna que rechaza el extremismo de los que no creen en nada". Mientras las puertas de las Cortes, varios centenares de indignados se han manifestado, esta vez de forma pacífica. En el interior Camps, que será reelegido presidente de Valencia por tercera vez consecutiva, ha subrayado que "para cambiar lo que no funciona no hay atajos: sólo se consigue desde el trabajo en las instituciones democráticas". "En estas cortes no hay espacio para la confrontación violenta y la ruptura antisistema", ha dicho antes de concluir afirmando que hay que "transformar la indignación y el desorden en compromiso y en respeto".