Que Tayip Erdogan será el más votado en estas elecciones es algo que nadie pone en duda en Turquía. La duda está en con qué margen logrará revalidar un tercer  mandato.Muchos en este país prefieren que el líder del Partido Justicia y Democracia no arrase en las urnas, por eso, se inclinan por su principal rival, el republicano, Kemal Kiliçdaroglu, quien hoy después de votar ha manifestado que espera que la campaña electoral de su grupo de sus frutos.Paradójicamente este hombre de 63 años es percibido como menos democrático y asociado al viejo orden de los militares, aún así los últimos mensajes han sido más tolerantes lo que podría reportarle  un 30 por ciento de los votos, muchos de ellos liberales.La campaña ha estado salpicada por la publicación de vídeos eróticos sobre las relaciones sexuales de miembros de la ultraderecha, la tercera fuerza del país. Sus afiliados han acusado al primer ministro Erdogán de estar detrás de este "chantaje político", ya que sería el primer beneficiado por la pérdida de votos. Unos votos muy codiciados porque el primer ministro quiere sacar adelante una nueva Constitución que convierta a Turquía en un sistema presidencialista y a él en un nuevo sultán al estilo de Ataturk.