Miles de egipcios se manifestaron ayer para  exigir al nuevo Gobierno un calendario preciso de reformas legislativas. Pero la concentración se convirtió en la muestra del creciente sentimiento anti israelí,presente en todo el país. Fuego y violencia rodearon el edificio de la embajada de Israel. Durante el asalto, se quemaron y se arrojaron por las ventanas cientos de documentos. Una persona murió por un ataque al corazón y al menos 450 resultaron heridas en los enfrentamientos. El embajador de Israel en Egipto ha abandonado el país en avión y ya se encuentran en Israel. Tras ello, el primer ministro egipcio, Essam Sharaf, ha convocado una reunión del gabinete de crisis. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha calificado de "incidente serio" el asalto a la embajada de su país en Egipto. Además, ha agradecido la ayuda del presidente de EEUU, Barack Obama. La tensión entre los dos países es creciente desde la salida del poder de Hosni Mubarak y la muerte de cinco policías egipcios tras un bombardeo israelí en la Franja de Gaza el pasado mes de agosto.