Aún sin recuperarse del temblor anterior que dejó 600 muertos, un nuevo  terremoto de 5,7 grados en la escala Richter ha vuelto a sacudir la localidad de Van, en el este de Turquia. Al menos 18 edificios, entre ellos dos hoteles y otro de oficinas, se han derrumbado. En medio del caos y el desconcierto, los equipos de rescate y voluntarios se afanan buscando bajo los escombros. Ya han logrado rescatar a varios supervivientes. Sobre el terreno ya trabajan las grúas y distinta maquinaria, el tiempo corre en contra. Tras el terremoto, que tuvo lugar sobre las ocho de la tarde, hora local, ya se han registrado varias réplicas.