Una furgoneta típica en un control típico de la Guardia Civil en una zona fronteriza. Pero fue la matrícula francesa del vehículo lo que despertó las sospechas de los agentes. Pidieron la documentación al presunto etarra y mientras comprobaban los datos el sospechoso huyó con el todoterreno de la Guardia Civil. La furgoneta transportaba 10 kilos de explosivos, bidones para zulos, una pistola, un revólver y placas de matrícula y documentación falsa. Los explosivos no estaban listos para estallar. Una hora después de la huída era la Policía portuguesa la que detenía al sospechoso. Pero Garikoitz García no iba sólo. Le acompañaba un vehículo lanzadera conducido por una de las etarras más buscadas. Varias horas después Iratxe Yañez era detenida también por la Guardia Republicana Portuguesa. Se está investigando si venían desde Francia a Portugal para iniciar una campaña de atentados. Todo un sobresalto para un pueblo de apenas mil habitantes que esta mañana todavía digería el suceso. Una decena de vecinos tuvieron que ser desalojados durante más de 6 horas. Ahora todo está en manos de la justicia portuguesa. Los dos etarras siguen detenidos a la espera de una extradición. Esta mañana el todoterreno robado a la Guardia Civil ya pasaba la frontera hacía España.