El defensa del Real Madrid, Pepe, continúa con su recuperación , trabajando muchas horas cada día en el gimnasio y en piscina para rehabilitar el ligamento cruzado que se rompió hace dos meses.Todos los días cumple la misma rutina. Empieza con electroterapia, que sirve como analgésico para reducir el dolor y como potenciador de la musculatura de la articulación. Después, los fisioterapeutas trabajan en la movilidad de la pierna y le aplican frío, mediante crioterapia.Tras esto, llega el momento de la piscina donde realiza trabajos de movilidad y fortalecimiento. En el pasillo de marcha y carrera, con paredes transparentes, los médicos pueden visualizar la biomecánica de la rodilla derecha de Pepe.Finalmente, el jugador portugués acude al gimnasio donde ejercita el resto de su cuerpo. Ya en casa, tres horas de ejercicios de movilidad y aplicación de hielo para poner fin al tratamiento diario.