Después de que el Gobierno, de la mano de su vicepresidente Alfredo Pérez Rubalcaba anunciase que tiene previsto aprobar en el próximo mes de marzo una "ley de muerte digna" con el fin de regular los derechos de los enfermos terminales, la ministra de Sanidad, Leire Pajín, ha dicho que es una ley, encaminada, especialmente, "a mejorar los derechos de los pacientes que tienen una enfermedad incurable" y que atraviesan "momentos dolorosos" al final de su vida. La ministra también se ha referido a las mejoras que, a su juicio, la ley traería a médicos y familiares. Pajín ha dicho que el objetivo del Ejecutivo es la elaboración de una ley como la que fue aprobada este año en el parlamento de Andalucía, o como la que existe en Francia, ejemplos éstos "de consenso y de buen hacer en esta materia". "Nos basaremos en esos textos y avanzaremos en esa dirección", sentenció.