Según un estudio del Real Automóvil Club de Cataluña, uno de cada diez jóvenes reconoce que conduce tras haber bebido alcohol. Además, hay mucho desconocimiento acerca del asunto entre los jóvenes.Un vaso y medio de cerveza ya daría positivo en un control de alcoholemia, pero la mayoría de los jóvenes creen que es necesario beber cuatro vasos y medio. Dos copas de vino son suficientes para un positivo, los jóvenes creen que se necesitan cuatro copas y media. Dos chupitos darían también positivo, pero para muchos jóvenes serían necesarios hasta seis. El problema es que esta cantidad de alcohol en realidad estaría tipificado como delito en un control. Este es el curioso resultado de la encuesta del RACC entre jóvenes de 18 a 34 años. Según el estudio al menos una vez al mes, uno de cada 10 reconoce conducir borracho o ir con un conductor borracho. El estudio también derriba falsos mitos para bajar el nivel de alcohol.Pero a pesar de todo esto, 8 de cada 10 jóvenes, dice la encuesta, estarían a favor de una tasa de alcohol 0 para conductores noveles.