Más de un millón de fieles han asistido a la misa que ha ofrecido Benedicto XVI en la capital de Angola. El Papa ha ennumerado los males que, a su juicio, ensombrecen el continente africano, entre ellos, las rivalidades étnicas, las guerras o el aborto. Ha incidido especialmente en el conflicto en los Grandes Lagos. Durante su misa en Luanda, el Papa ha recordado también a las dos jóvenes que murieron ayer en una avalancha cuando querían verlo. La misa se ha celebrado bajo un fuerte calor y a ella han asistido obispos de varios países del sur de Africa.