Las manifestaciones en Honduras no cesan . Ahora son los seguidores del golpista Roberto Micheletti los que toman las calles.Pero mientras ellos marchan, Micheletti y el presidente depuesto Manuel Zelaya dan los primeros pasos para encontrar una solución a un conflicto que dura ya tres meses.Es la primera vez en cinco días que entra comida en la embajada de Brasil. Pero no sólo han entrado víveres en las últimas horas. Zelaya llegó aquí el lunes y ayer empezó a tener encuentros con distintos sectores de la sociedad hondureña. A dialogar con el obispo auxiliar de la capital y con los principales candidatos a las elecciones del próximo 29 de noviembre. Quiere encontrar con ellos una solución a la crisis. Lo mismo que intenta hacer Micheletti, pero con otros mediadores. Espera que la solución llegue de manos de la delegación internacional que encabeza el presidente de Costa Rica. Y mientras unos y otros acercan posiciones, se han restablecido los vuelos internacionales. Aunque el toque de queda por la noche continúa.