Con fuegos artificiales y la población en la calle ha cerrado Kosovo esta madrugada el día de su independencia. Los habitantes del país número 45 de Europa acompañaron la celebración con cánticos, comida, bebida y también disparos. Cuatro personas han resultado heridas de bala en la capital kosovar, Pristina. Las principales autoridades del nuevo país se unieron a la fiesta donde no ha parado de ondear la nueva bandera de Kosovo.