La antorcha olímpica más polémica y vigilada de la historia ya está en Argentina. la llama ha sido trasladada en el interior de este autobús desde su llegada a Buenos Aires hasta un lugar secreto donde ha permanecido toda la noche. La capital argentina repite las fuertes medidas de seguridad activadas San Francisco mientras sigue aumentando la lista de ausentes en la ceremonia de inauguración de los Juegos de Pekín. El último en confirmar que no estará allí ha sido el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon.