La antorcha olímpica ha comenzado ya su recorrido por las calles de Bangkok, la capital de Tailandia, a donde llegó ayer procedente de India. El fuego sagrado ha viajado rodeado de fuertes medidas de seguridad, después de que en Nueva Delhi 180 activistas pro-Tibet fueran detenidos. Durante los relevos de hoy, la antorcha será custodiada por los representantes de las autoridades chinas, y no de la policía tailandesa.