Miles de militares italianos han comenzado hoy a patrullar las calles del país. Vigilar objetivos sensibles y los centros de inmigración en las principales ciudades del país para reforzar la seguridad, será otra de las funciones de los soldados. La medida se prolongará durante seis meses. Parte de los 3.000 militares previstos pueden verse recorriendo las vías de nueve ciudades italianas, Roma, Milán, Nápoles, Bari, Catania, Padua, Palermo, Turín y Verona. Los soldados van con uniforme o vestidos de camuflaje, según las labores que tengan asignadas.