Los hombres de Bernd Schuster han tenido tiempo para probar el césped del estadio italiano, donde se han ejercitado por última vez antes del encuentro de mañana. En la sesión no han faltado las 'tiranteces'. Iker Casillas y Sergio Ramos se han 'enzarzado' en una bronca cuando el portero le ha recriminado al defensa que le tocaba ponerse en el centro de unos de los rondes del entrenamiento y al defensa no le sentó nada bien la reprimenda.