Entre el champán y el vino, en las fiestas navideñas, el consumo de alcohol entre la población se multiplica por tres. Pero si hay un colectivo especialmente sensible a los excesos, son los jóvenes. Los expertos creen que con la crisis habrá un repunte de los botellones. Además, dicen, muchos optarán por bebidas más baratas y, por tanto, potencialmente más nocivas. Por eso, la ONG valenciana Controla Club lleva a cabo una agresiva campaña para sensibilizar sobre los riesgos de un consumo sin control, su lema es: "si no controlas, te lo pierdes".