Los grandes almacenes de Printemps, situados en el bulevard Hausman, en pleno centro parisino, han sido reabiertos después de que la policía francesa hallase cinco paquetes de explosivos en los lavabos. . La intención del desconocido Frente Revolucionario Afgano era provocar el pánico y no una matanza. Han colocado en los aseos de hombres y de mujeres cinco paquetes de dinamita metidos en bolsas de plástico y atados con un cordón. Después han avisado a la agencia France Press a través de un correo que ha hecho saltar todas las alarmas. De inmediato, el centro comercial ha sido evacuado por un problema técnico, decían; sin embargo nadie se lo ha creído porque la alerta de atentado ha sido más fuerte.