Fuerzas de seguridad del Estado en Honduras mantienen cercado el medio de comunicación donde se encuentra resguardado el periodista David Romero, quien fue condenado a 10 años de prisión después de la demanda por difamación que le interpusiera la esposa del fiscal general adjunto. Con una sentencia firme sólo desde el Congreso nacional se podría contrarrestar la medida para despenalizar el delito de injuria y calumnia. Para los defensores de Derechos Humanos, una vez que se logre encarcelar a David Romero, vendrá un proceso de criminalización a todo aquel comunicador que se atreva a hacer un señalamiento al gobierno. teleSUR