La tensión en la frontera entre Turquía e Iraq es cada día mayor. La aviación ha atacado las posiciones de la guerrilla kurda del PKK en el país vecino, y continúan los preparativos para una posible operación terrestre. Los combatientes kurdos por su parte han mostrado imágenes de soldados prisioneros. El gobierno turco se encuentra sometido a una presión creciente por parte de los militares y de la opinión pública, que le pide mano dura.