Tal y como se ha narrado ya, los padres de Madeleine estuvieron cenando con siete amigos la noche de la desaparición. Durante las pesquisas todos defendieron la inocencia de los McCann, pero mantuvieron importantes contradicciones. Ahora, según la prensa, dos de ellos han decidido modificar su versión pero mantendrán el anonimato por temor, dicen, a las presiones.