La situación de los elefantes de selva africanos es muy preocupante.
Según los resultados publicados en 2016 por el censo de Paul G. Allen’s Great Elephant,
en los últimos siete años ha disminuido su población un 30% debido sobre todo a la caza furtiva para conseguir el marfil de sus colmillos.
Quienes trabajan en salvar esta especie cuentan con una novedosa herramienta: la inteligencia artificial.
Conservation Meetrics es un proyecto impulsado por Microsoft que emplea el machine learning para monitorizar la vida de estos animales.
Se usan algoritmos avanzados y con la colaboración de la Universidad de Cornell se distinguen los barritos de los elefantes de selva africanos del resto de sonidos.
Con los datos de las llamadas de los elefantes los investigadores pueden estimar su población, monitorizar sus movimientos, intentar garantizar su seguridad e identificarlos individualmente.
Con machine learning se pueden detectar patrones de movimiento en tiempo real que alertan de la llegada de cazadores furtivos y hasta bloquear anuncios online sobre la comercialización de marfil.