Los bebés son propensos a los resfriados y se les tapona la nariz enseguida. El exceso de mucosidad entorpece su respiración y les molesta al comer y dormir. Es necesario que los padres aprendan a sacárselos. Mayte González, especialista infantil en Fun&Fit, nos eneña en este vídeo las técnicas existentes y cuál de ellas es la más efectiva.