¿Todavía no la has leído?
En ella habla de los últimos momentos de vida de una mascota.
Nos da una lección acerca de la importancia de estar presentes en caso de que se requiera un final sin dolor.
El animal busca, en esa habitación vacía, el rostro de sus seres queridos, de las personas que lo han sido todo en su vida.
No entiende cómo se le ha podido dejar solo con humanos a los que no conoce.
Nos busca y siente miedo, mucho miedo.
Si se da el caso, no pienses solo en tu dolor, sé valiente y acompáñale en ese último momento. Tu mascota lo merece.