Los asesinatos de personas ligadas a la contiende electoral en México se convirtieron en una constante desde el inicio del proceso en septiembre de 2017. Hasta el 19 de junio se habían registrado 120 políticos asesinados, entre ellos varios candidatos. El mayor número de ejecuciones tiene lugar en estados como Guerrero, Oaxaca y Michoacán, aunque especialistas aseguran que hay otras zonas donde podría incluso ser difícil el ingreso de las urnas, como en el norte de Tamaulipas. teleSUR