Madrid, 26 ene (EFE).- (Imagen: Raúl García Cabo) Zinedine Zidane, técnico del Real Madrid, recuperó la sonrisa que perdió tras ser eliminado por el Leganés de la Copa del Rey, mostró confianza ciega en su plantilla y en las posibilidades de dar la vuelta a todo ganando la Liga de Campeones, sintiéndose "fuerte para cambiar la situación".
Con la Liga perdida a 19 puntos del Barcelona, eliminado de Copa del Rey siendo remontado en el Santiago Bernabéu por el Leganés, el mensaje de Zidane cambió el tono e intentó transmitir optimismo pensando en la eliminatoria de Liga de Campeones ante el PSG.
"Solo se habla de cosas negativas. Yo hablo con el presidente y voy a seguir con la misma ilusión, pensando en ganar los tres puntos en Valencia y al final veremos lo que va a pasar por el club y por todos, por la situación. Si no ha sido bueno el año y hay que cambiar cosas, pero eso no se va a decidir ahora. Noto el apoyo del presidente", aseguró.
El técnico madridista sigue sintiendo también el respaldo total de sus jugadores y aseguró que si ve que su mensaje no llega a la plantilla se "marcha mañana". En plena crisis madridista puso todo en perspectiva y dejó un mensaje positivo.
"Es la parte del fútbol que tiene que vivir un futbolista, con momentos buenos y malos. El del otro día es malísimo, hay que aceptarlo y levantarse porque hay cosas peores en la vida. Quiero cambiar la situación, me siento fuerte para hacerlo. Si no habría un problema", manifestó.
Tras señalarse como responsable de la eliminación copera, pero admitir hoy que repetiría el mismo equipo que puso y volvería a dejar en la grada a jugadores como Gareth Bale, Cristiano Ronaldo, Toni Kroos y Marcelo, el técnico madridista admitió ser el centro de la crítica.
"Ahora mismo no puedo estar contento con tantas críticas que recibo pero es normal cuando se dan malos resultados y algo va mal. Hay que aceptar la crítica. Ya sabía lo que es cuando empecé a trabajar aquí, pero no me van a impedir hacer el trabajo como quiero. Si pensaba que no pudiese cambiar la dinámica ya me habría ido, no estaría mañana. Nos faltan 19 partidos de Liga y la eliminatoria de Champions. Solo pienso en eso", dijo.
El camino a seguir lo tiene claro Zidane, pensar solo en el presente, jugar bien y ganar el próximo partido, para recuperar la confianza perdida.
"Intento seguir con la ilusión que tengo, mejorarme como entrenador e intentar que mi plantilla siga la misma línea, pensando en hacer las cosas bien. Lo que he ganado es pasado y no lo pienso. El otro día estaba muy decepcionado porque no me lo esperaba, pero es una parte del fútbol que hay que aceptar y nadie me va a quitar la ilusión de cada día. Los jugadoras están decepcionados y les molesta, no les da igual la situación", defendió.
Dejó claro Zidane que no tiene decidido su futuro y no es el momento de pensarlo. "No lo tengo decidido porque vivo el día a día. Cuando las cosas me funcionaban decía lo mismo y te lo digo con la sonrisa que llevo dent