El analista político, Martín Guerra, en entrevista para teleSUR, explicó que el hecho de que el gobierno del presidente boliviano, Evo Morales, haya querido regular el servicio de salud para entenderlo como la satisfacción de las necesidades de salud de la población frente a los privados que entienden la salud como una mercancía, es una buena medida. "Traslucen dos cosas: que la salud pública no puede prescindir de los gremios privados y que los privados quieren seguir haciendo lo que se les da la gana y no aceptan que haya mecanismos de regulación de sus actividades", indicó. teleSUR