La Fiscalía investiga por un delito de calumnias a la mujer que acusó a un agente de la Policía Nacional de manosearle los pechos durante el desalojo de un colegio electoral en Barcelona durante la jornada del referéndum ilegal del 1-O.
En un escrito, el fiscal de Delitos de Odio y Discriminación de la Fiscalía de Barcelona, Miguel Ángel Aguilar, solicita al juez de Barcelona que investiga las cargas policiales del 1-O que le facilite una copia de la querella de la mujer, Marta Torrecillas, y de su declaración judicial, si se ha producido, para comprobar la "veracidad o falsedad" de los hechos investigados.
El fiscal sitúa su petición al juez en el marco de una investigación que el ministerio público ha abierto por un delito de calumnias a esta mujer, que denunció que en la jornada del 1-O un agente de la Policía que estaba desalojando el Instituto Pau Claris de Barcelona, donde el Govern fijó un punto de votación del referéndum, le manoseó los pechos y la arrojó escaleras abajo.
La denunciante también cobró notoriedad aquella jornada porque aseguró ante los periodistas que la policía le había roto "uno a uno" todos los dedos de una mano, si bien en días posteriores aclaró que sólo sufría una capsulitis (inflamación de la cápsula articular).
El fiscal ha pedido al titular del Juzgado de instrucción número 7 de Barcelona que le remita una copia de la querella presentada por la mujer contra la Policía, por un delito de lesiones y otro contra la integridad moral, así como una copia de su declaración ante el juzgado, si se hubiese producido.
El juez desestimó el pasado 23 de noviembre la pretensión de la Fiscalía de archivar todos los casos de heridos que aún no habían denunciado y anunció que se pondría en contacto con ellos, directamente o través de la policía, para ofrecerles la posibilidad de emprender acciones.
Este magistrado tiene por el momento sobre la mesa más de 230 denuncias por parte de lesionados por las cargas policiales durante el referéndum del 1-O.