La Commission Europea espera alcanzar este jueves un acuerdo con los Estados miembros sobre la renovación de la licencia del herbicida glifosato que expira el 15 de diciembre.

Varios países, incluidos Francia, Austria, Italia y Bélgica, han expresado su rechazo a una autorización por diez años, como proponía inicialmente Bruselas, y confían en que el plazo sea inferior.

El Ejecutivo comunitario propone, de hecho ahora, que la licencia se renueve por cinco años y que la decisión obtenga el mayor apoyo posible de los Estados miembros al mismo tiempo que se garantiza una alta protección de la salud humana y el medio ambiente.

“Se va a tomar una decisión muy importante sobre el futuro del glifosato en Europa y para la gente es esencial. Esta acción tiene como objetivo mostrar a todo el mundo el impacto del glifosato en la salud de las personas, en la de los adultos y en la de los niños. La gente quiere que se prohiba el glifosato”, afirma Luis Morago, director de campañas de Avaaz.

Pero alcanzar un acuerdo podría ser difícil. El ministro francés de la Transición Ecológica, Nicolas Hulot, ya advertido de que París votará contra cualquier propuesta para una nueva autorización europea superior a tres años.