Con el espíritu de Lenín siempre presente, militantes y simpatizantes del Partido Comunista ruso han cumplido con la tradición de cada 7 de noviembre. Un 7 de noviembre diferente porque han conmemorado el centenario de la Revolución bolchevique de 1917.
Tras la marcha, los líderes comunistas rusos como Guennadi Ziugánov, han reivindicado los valores revolucionarios: “Podemos lograrlo todo bajo la bandera de Lenin, bajo la bandera de la victoria, bajo la bandera de la Revolución de Octubre. En 1991 (con la disolución de la Unión Soviética) todos fuimos traicionados, pero no nos damos por vencidos y aquí estamos unidos por el Partido Comunista”.
Entre los manifestantes, muchos moscovitas nostálgicos pero también extranjeros llegados hasta la capital rusa para denunciar los excesos del capitalismo: “Cada día estamos viendo cómo el capitalismo decide el futuro de sociedades enteras, y convierte en pobre a la mayor parte de la población, así que sí, la Revolución está de actualidad”, dice Leonardo.
“Esta idea no es vieja para nada, es absolutamente moderna ¡funciona! podemos dar respuesta a preguntas actuales y explicar qué está sucediendo con las respuestas del marxismo-leninismo, explica Vasily.
En los tiempos soviéticos, el 7 de noviembre era una festividad en rojo en el calendario. La Plaza Roja era el escenario de grandes desfiles militares y manifestaciones, pero los tiempos han cambiado.
Galina Polonskaya, euronews.
Según los últimos sondeos dedicados al centenario de la Revolución de Octubre, la mayoría de los rusos son favorables a los cambios aunque más del 90% de los encuestados está en contra de cualquier nueva revolución.