¿Otra masacre del llamado Estado Islámico en Siria?
Todo apunta en ese sentido. Poco después de haber arrebatado al-Qaryatayn al Dáesh, las fuerzas leales a Bachar al Asad han descubierto decenas de cadáveres de civiles, entre 60 y 80. Y, además, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos habría al menos un centenar de desaparecidos.
Al-Qaryatayn, en la provincia de Homs, estuvo en manos del EI durante tres semanas hasta que el 21 de octubre las tropas lealistas la recuperaron.
El nuevo gobernador de la ciudad asegura que los yihadistas masacraron a la población antes de retirarse, con el falso pretexto de que eran colaboracionistas y habían pasado información al régimen de Damasco sobre los movimientos de los combatientes.