En Puerto Rico, la destrucción se percibe en todas las calles del país tras el paso del huracán María. Las telecomunicaciones se encuentran aún interrumpidas y continúan las afectaciones al suministro de luz. El gobernador declaró un toque de queda a partir de las 6 de la tarde, aunque no ha sido respetado por los ciudadanos que continúan desplazándose para contactar con sus familiares y adquirir comida. teleSUR