Es una realidad. Tras casi dos décadas de espera, desde que concibieran el proyecto, las autoridades iraníes han inaugurado la planta de energía solar de Mokran, en la provincia oriental de Kerman. Se trata del mayor complejo de este tipo en el país y tiene una capacidad de producción de 20 megavatios.
“Hasta ahora se han hecho ofertas por valor de 3.600 millones de dólares de inversión extranjera en energías renovables”, declara el ministro iraní de Energía, Hamid Chitchian.
Una acción cada vez más común estos días que tiene explicación en las palabras del alemán Hans Josef Fell, Presidente del Energy Watch Group.
“Ahora las tecnologías solar y eólica son muy baratas. Más baratas, que la energía procedente del gas, el petróleo, el carbón, que la nuclear… y, por lo tanto, podemos reemplazar el sistema de energía convencional por otro que sea totalemnete renovable en el futuro “, declara.
En un futuro no muy lejano, Irán dispondrá de planta de energía solar de 100 megavatios, que será la más grande de Oriente Medio.
Con un promedio de 2.800 horas de sol al año, Irán está considerado como uno de los mejores países para la producción y el uso de energía solar. Este potencial y los incentivos ofrecidos por el Gobierno han proporcionado considerables oportunidades de invertir en este campo, señala para Euronews, en tierras iraníes, Javad Montazeri.