Cinco presuntos militantes del autoproclamado grupo Estado Islámico han resultado muertos durante una operación antiterrorista, en Turquía. Los hechos han tenido lugar en la ciudad de Konya, situada a unos 250 kilómetros al sur de Ankara, la capital del país.
Según fuentes oficiales, este miércoles de madrugada, la policía ha irrumpido en un inmueble para intentar localizar y detener a un supuesto terrorista previamente identificado. Se sospecha que los cinco individuos abatidos podrían formar parte de una célula terrorista que pretendía cometer un atentado estos días, coincidiendo con el aniversario del fallido golpe de Estado.
Durante la operación, que forma parte de las medidas previstas para la protección de edificios públicos, cuatro agentes resultaron levemente heridos.