Más presión sobre Corea del Norte para que suspenda sus programa nuclear. Es la petición que Estados Unidos ha hecho a China durante una reunión entre la diplomacia de ambos países en Washington. Un encuentro que ha tenido lugar tras la visita del presidente Xi Jinping a Donald Trump el pasado abril.
El secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, se mostraba contundente:
“Instamos a una desnuclearización completa, verificable e irreversible de la península coreana y a que Corea del Norte frene su programa ilegal de armas nucleares y sus pruebas de misiles balísticos, como se estipula en las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU”.
Poco antes del comienzo de la reunión, Trump publicó un polémico mensaje en la red social Twitter en el que afirmaba que los esfuerzos de persuasión por parte de China en Corea del Norte habían fracasado.
Las conversaciones tienen lugar en medio de la creciente tensión entre Estados Unidos y Corea del Norte, con la amenaza de una guerra nuclear por parte del régimen de Kim Jong-un. Asimismo, ocurren tras la muerte del estadounidense Otto Warmbier, estudiante repatriado en coma tras pasar más de un año detenido por robar un cartel con un eslogan político del hotel norcoreano en el que se alojaba.