Familiares y víctimas del envenenamiento masivo por medicinas del sector salud público panameño siguen pidiendo justicia. Además han apelado la sentencia que sancionaba a penas menores a funcionarios responsables. En 2006 la caja de seguro social del país centroamericano entregó 15 mil recetas para un expectorante que estaba contaminado con la sustancia tóxica Dietilenglicol. El saldo fue de 200 muertos y más de mil 100 afectados por las secuelas. teleSUR