A seis años de la invasión de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) a Libia, liderada por Estados Unidos y que derivó en el derrocamiento de Muammar Al Gadafi, el que fuera el país con el índice de vida más elevado en todo el continente africano se encuentra en una profunda crisis política, asediado por el terrorismo y vive la amenaza de una nueva intervención, contrario a las promesas hechas por Occidente. teleSUR