Este jueves en Colombia, un juez condenó a 21 militares por participar en los denominados "falsos positivos" durante el 2008. Los sancionados son un coronel y otros militares acusados de asesinar a cinco jóvenes que fueron traslados bajo falsas promesas de un trabajo hasta una zona rural en el departamento de Santander para ejecutarlos y hacerlos pasar por guerrilleros. Esta sentencia fue emitida un día después de que la Corte Penal Internacional (CPI) denunciara que en la nación neogranadina siguen produciéndose estos casos.