La oposición paquistaní ha desconvocado la gran manifestación con la que pretendía paralizar este miércoles Islamabad para pedir la dimisión del primer ministro, Nawaz Sharif.

El Tribunal Supremo ha permitido que se investigue por corrupción a la familia de Sharif, en relación con los papeles de Panamá, y esa decisión ha calmado los ánimos del partido populista PTI y de su líder, Imran Khan. En lugar de la gran marcha para bloquear la capital, Khan propone que los suyos celebren este miércoles la decisión judicial con un desfile festivo, lejos del corazón comercial y gubernamental de Islamabad. “Si Dios quiere, reuniremos a un millón de personas”, dijo.

Los papeles de Panamá revelaron que tres de los hijos de Sharif tienen compañías en paraísos fiscales con las que controlan propiedades en Londres. Desde su publicación en abril, la oposición paquistaní ha multiplicado las protestas. Una de ellas, en una autopista en Penshawar e Islamabad, acabó este lunes en enfrentamientos con la Policía.