Aislada en las enigmáticas montañas de Cuzco se encuentra la comunidad quechua de Patacancha. Sus mujeres, ataviadas con anchas faldas de vivos colores, viven del mismo modo que hace cientos de años: dedican sus días a elaborar hermosos tejidos a partir de la lana de las alpacas y ovejas que ellas mismas cuidan.
La joven diseñadora y emprendedora Samantha Peña dejó su vida en París para lanzarse a la aventura en su tierra natal, Perú, en busca de mujeres tejedoras con el sueño de lanzar una colección de bolsos hechos con las telas elaboradas por las artesanas andinas.