Exomars, la última misión a marte de la Agencia Espacial Europea, la ESA, se encuentra en un momento clave. El satélite y la sonda de aterrizaje Schiaparelli fueron lanzadas el pasado catorce de marzo desde Baikonur, Kazajistán, en el cohete Protón M. Están a punto de tomar tierra en el planeta rojo.
El posicionamiento de la tierra y de marte ha permitido reducir el viaje a siete meses.
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Tweet de la ESA para ver en directo la llegada de la misión a marte.
El 19 de octubre, Schiaparelli, el módulo demostrador de tecnologías ideado para ensayar la entrada, descenso y aterrizaje en la superficie de marte, entrará en la atmósfera marciana, descenderá y tomará tierra en una operación que durará seis minutos.
La información reunida en este corto espacio de tiempo mostrará la tecnología necesaria para enviar a marte un vehículo rover. La ESA asegura que se trata de muchas misiones envueltas en una.
¡Nuevo artículo! – #Marte da la bienvenida a #ExoMars gracias a esamarswebcam: https://t.co/3H6JPxzHbP pic.twitter.com/F88WsYIV61— ESA España (esa_es) 17 de octubre de 2016
“Separamos el módulo no demasiado pronto para conseguir precisión en el aterrizaje, pero tampoco demasiado tarde para tener tiempo de reorientar el satélite TGO, que consiga altitud y no se estrelle contra marte”. explica Michel Denis, Director de Operaciones de Vuelo de ExoMars.” Porque se encuentra en una ruta de colisión hasta el momento de la separación, para poder llevar a Schiaparelli hasta el suelo, en el centro, esperamos, de una elipse de aterrizaje”.
Mientras la nave en órbita realizará varios experimentos científicos, la sonda de aterrizaje será empleada para probar tecnologías para futuras misiones a marte. Su nombre rinde homenaje a Giovanni Schiaparelli, un astrónomo italiano que mapeó la superficie del planeta rojo en el siglo XIX.
El punto de aterrizaje previsto está cerca del ecuador marciano. Mide unos cien kilómetros de longitud y quince de ancho. Se trata de una zona relativamente suave y plana muy estudiada.
Schiaparelli empleará un escudo de calor, paracaídas y sistemas de propulsión para ralentizar el descenso hacia la superficie rocosa.
Se probará de esta forma la tecnología de la misión Exomars de la ESA prevista para 2020. También analizará el entorno del lugar de aterrizaje.
Otro de sus grandes objetivos será buscar una explicación a la presencia de gases como el metano. La mayor parte del metano presente en la atmósfera terrestre procede de la vida de animales y plantas, así como del propio entorno. El metano en marte plantea, por tanto, la posible existencia de vida, de microorganismos, en el pasado o en el presente.
El satélite descenderá lentamente hacia la órbita de marte, donde analizará su atmósfera. Tardará un año en llegar a su ór