Las polémicas afirmaciones que Trump ha hecho a lo largo de la campaña coparon el primer y único debate entre los candidatos a la vicepresidencia celebrado en Virginia.

Los continuas interrupciones fracturaron un debate en el que el senador Kaine se mostró más combativo, reprochando al gobernador Pence las acusaciones de Trump sobre los mejicanos o su posición sobre las armas nucleares. Ataques de los que se defendió Pense con calma.

“Ninguno de los aspirantes a la vicepresidencia salió claramente derrotado aunque los analistas coinciden en decir que el gobernador republicano de Indiana marcó algunos puntos.

Su rival demócrata, el senador de Virginia Tim Kaine, también supo golpear con fuerza rozando incluso la agresividad, inncesaria quizás puesto que lidera los sondeos.

El problema para los republicanos está en que Pence apareció como la antítesis de su compañero de fórmula durante el debate frente a Hilary Clinton: tranquilo, competente y coherente.

Trump que aborrece que le contraríen será comparado en contraste no solo con Clinton sino también con su vicepresidente.

Mientras tanto Pence estaría allanando el terreno para su propia carrera presidencial en 2020”, explica Stefan Grobe, corresponsal de Euronews en Estados Unidos.