Colombia intenta restañar sus heridas. Un día antes de que los colombianos se pronuncien en referéndum sobre el histórico acuerdo de paz, las FARC han pedido perdón por la matanza de La Chinita, hace 22 años, una de las peores cometidas por la guerrilla.
“Hemos venido (...) a pedirles perdón con humildad por todo el dolor que hayamos podido ocasionar durante el transcurso de esta guerra. Todos en la vida hemos cometido errores, algunos con consecuencias más graves que otros. Nada perdemos con reconocerlo”, dijo durante el acto Luciano Marín, alias Iván Márquez, jefe negociador de las FARC en los diálogos de paz.
Fotos: Así fue el perdón de la Farc por la masacre de La Chinita. https://t.co/0Rc3iRSEvX pic.twitter.com/GI5YdPY0MQ— El Espectador (@elespectador) 1 October 2016
Una noche de enero de 1994, guerrilleros de las FARC irrumpieron en una fiesta en un barrio popular de Apartadó, en el noroeste de Colombia. Sin mediar palabra, acribillaron a balazos a treinta y cuatro hombre y una mujer.
Con esa pesada mochila de muerte y dolor a las espaldas, las FARC intentan ahora iniciar su andadura política. Este domingo los colombianos dirán si aceptan o no los términos del histórico acuerdo firmado esta semana en Cartagena para tratar de poner fin a más de medio siglo de conflicto y 220.000 muertos.