Tras declarar el alcalde de la ciudad estadounidense que el autor de los disparos era un abogado enfrentado con su jefe, la Policía ha anunciado que, en el momento del tiroteo, el sospechoso llevaba un uniforme con simbología nazi.
“Llevaba vestimenta militar. No sé exactamente de qué país ni de que ejército pero entre sus pertenencias hemos encontrado objetos de simbología nazi. También tenía en su casa. En el registro descubrimos otros uniformes y objetos militares de coleccionista, algunos de la Guerra de Secesión”, declaraba el capitán Dwayne Ready.
Las autoridades siguen investigando las razones de un tiroteo que dejó nueve heridos en un centro comercial de la ciudad texana.
Lo que de momento se sabe es que el abogado llevaba un fusil y una pistola, las dos semiautomáticas y compradas legalmente, y que empezó a disparar indiscriminadamente a los coches allí presentes antes de ser abatido por la Policía.