Los berlineses votan este domingo, en unos comicios que suponen un test para la canciller alemana, Angela Merkel, y en los que se espera un avance importante de la extrema derecha.
Debilitada por el descontento de su política migratoria, la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Merkel no debería cosechar más de un 19% de los votos, según las encuestas.
Desde hace 15 años el Partido Socialdemócrata (SPD) domina en Berlín. Los sondeos le otorgan en esta ocasión entre un 21% y un 24% de los votos, unos resultados históricamente bajos.
Sin embargo, la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) podría cosechar hasta un 15%.
El actual alcalde de Berlín, Michael Michael Müller (SPD) ha dado la voz de alarma: “Veremos. Recuerdo cuando hubo las protestas de Pegida, hubo una fuerte resistencia en Berlín. Los resultados de las elecciones en Mecklemburgo-Pomerania Occidental movilizaron a la gente (en contra de Alternativa para Alemania) aquí, para decir que no queremos esto en nuestra ciudad, no lo toleraremos”.
“¿Nos da igual una AfD con 10-14%? No, sería visto en el mundo entero como el signo de la vuelta de la extrema derecha y de los nazis”, decía Müller en su cuenta de Facebook.
Actualmente en coalición con la CDU, el SPD podría optar esta vez por compartir la alcaldía de Berlín con la izquieda radical de Die Linke y los Verdes. Un nuevo revés para el partido de Merkel, a un año de las elecciones generales. El pasado día 4, Alternativa para Alemania (AfD) humilló a la CDU en Mecklemburgo-Pomerania Occidental, el ‘Land’ (estado) del este donde creció Merkel y donde tiene aún su distrito electoral.
Dos millones y medio de electores están llamados a las urnas en las municipales berlinesas.